Este miércoles, la Oficina Municipal de Información Laboral (OMIL) de Santiago llevó a cabo el tercer encuentro anual “Red de Empresas por STGO 2024”, un evento orientado a fomentar la innovación y las alianzas estratégicas en el ámbito laboral. La jornada contó con la participación de diversas figuras del mundo empresarial y académico, destacándose la asistencia de ASEXMA Chile, liderada por su presidente, Roberto Fantuzzi.
El evento inició con un conversatorio moderado por Hugo Cuevas, Director de Desarrollo Comunitario de Santiago, y contó con la intervención de destacados expertos, como Lilian Denham Martini, publicista y consultora en género; Rodrigo Gorostiza, ingeniero comercial y líder del proyecto digital Headhunting de Trabajando.com; Sebastián Cea, ingeniero civil y coordinador del Centro de Innovación y Emprendimiento de la Universidad de Chile, OpenBeauchef; y el propio Roberto Fantuzzi.
Durante el conversatorio, Roberto Fantuzzi subrayó la necesidad de estrechar los vínculos entre las empresas y el Estado para avanzar juntos hacia la innovación. “Aunque pueden existir diferencias, ambos se necesitan mutuamente”, señaló. Además, hizo un llamado a las empresas a capacitar y aprovechar el potencial creativo de sus trabajadores, destacando que “el pecado del mundo empresarial es no capacitar. Al hacerlo, no solo cambia el trabajador, sino también su familia”.
Lilian Denham Martini, por su parte, hizo especial hincapié en la importancia de la culturalidad laboral y cómo ésta impacta directamente en la empleabilidad. Denham destacó que la empleabilidad no sólo depende de la oferta y la demanda de trabajo, sino también de la cultura organizacional y las normas implícitas que existen en los entornos laborales. En su intervención, subrayó que las diferencias culturales y los prejuicios pueden influir negativamente en las oportunidades de empleo y en la calidad de los puestos ofrecidos. “Es esencial entender que no se trata solo de habilidades técnicas; la manera en que las personas se integran y aportan a la cultura de una empresa es clave para su éxito en el entorno laboral”, explicó.
Sebastián Cea centró su intervención en la “Economía Plateada”, un concepto que busca promover el desarrollo económico a través del aprovechamiento del cambio demográfico. Este enfoque, desarrollado dentro de OpenBeauchef, está ligado al programa Open Senior, que impulsa iniciativas para mejorar la calidad de vida de las personas mayores, permitiéndoles seguir siendo parte activa del mercado laboral. Cea explicó que factores como el aumento en la esperanza de vida y la baja tasa de natalidad crean una oportunidad para que este grupo etario siga aportando al mundo laboral. Sin embargo, también alertó sobre los retos que enfrentan los adultos mayores en el mercado, señalando que “las personas mayores tardan, en promedio, un año en encontrar empleo”.
Rodrigo Gorostiza, de Trabajando.com, destacó la necesidad de cambiar ciertos paradigmas culturales para avanzar en la innovación . “El problema no es solo tecnológico, también es cultural. No basta con implementar la transformación digital, también es esencial el desarrollo personal y de habilidades”, expresó. Asimismo, Gorostiza reflexionó sobre la importancia de la proactividad en la búsqueda de empleo: “Hoy no basta con enviar un currículum lleno de títulos, lo que importa es qué problemas puedes solucionar en la empresa a la que postulas”.
El encuentro también abordó los retos que plantea la Cuarta Revolución Industrial y la irrupción de la inteligencia artificial (IA) en el mercado laboral. Lejos de ser una amenaza, los expertos coincidieron en que la IA está generando más oportunidades de empleo. Roberto Fantuzzi destacó que, históricamente, cada vez que se produce una revolución industrial surgen miedos y mitos sobre la pérdida masiva de empleos o la obsolescencia de ciertos trabajos. Sin embargo, explicó que, aunque algunos puestos desaparecen, se crean muchos más, especialmente cuando las personas reciben la capacitación adecuada para adaptarse a las nuevas exigencias del mercado. “Lo importante es capacitar a las personas para ocupar esos nuevos puestos”, añadió Gorostiza, quien además subrayó el rol de la IA en procesos de reclutamiento más ágiles y personalizados, así como en la orientación para mejorar las habilidades de los postulantes.
También se señaló que uno de los grandes desafíos actuales es romper con ciertos paradigmas que aún persisten en el ámbito laboral, especialmente en relación a la inclusión de mujeres y personas mayores en el mercado de trabajo. “El concepto de culturalidad laboral implica generar un cambio en la forma en que las empresas ven a sus trabajadores y la forma en que estos se relacionan con sus espacios laborales. Esto es particularmente importante cuando hablamos de poblaciones que históricamente han sido subvaloradas o subrepresentadas en ciertos sectores”
Luego del conversatorio, se llevaron a cabo mesas de trabajo en las que los asistentes analizaron los factores que afectan la empleabilidad de ciertos grupos. Durante las mesas, se identificaron las principales razones por las que mujeres, jóvenes, personas mayores y personas con discapacidad enfrentan mayores dificultades para ser contratados. Los factores identificados fueron:
- Mujeres: A menudo enfrentan prejuicios relacionados con la maternidad y la conciliación entre la vida laboral y personal. Muchas experimentan lagunas laborales debido a licencias o periodos de cuidado de los hijos, lo que impacta su continuidad y las oportunidades de crecimiento profesional. Además, persisten estereotipos de género en el mercado laboral que dificultan su acceso a ciertos trabajos, especialmente en sectores tradicionalmente considerados exclusivos para hombres, como la industria o la tecnología.
- Jóvenes: La falta de experiencia laboral representa una barrera significativa, así como la percepción de que carecen de las habilidades “blandas” necesarias para adaptarse a los entornos laborales. Otra de las razones más mencionadas es la falta de compromiso y las altas expectativas laborales que, a menudo, superan la realidad del mercado.
- Personas mayores: Enfrentan prejuicios relacionados con la edad, como la creencia de que tienen dificultades para adaptarse a nuevas tecnologías o cambios en los procesos. Además, se les asocian problemas de salud propios de la edad, y en muchos casos, se les considera sobrecualificados para los puestos ofrecidos, lo que limita sus oportunidades laborales.
- Inclusión general: La falta de adecuación de los espacios laborales y el desconocimiento de las capacidades de estas personas suelen ser obstáculos para su integración laboral.
Durante las mesas de trabajo, los asistentes propusieron varias acciones para mejorar la empleabilidad de los grupos más afectados. Destacó la importancia de ofrecer programas de capacitación y actualización continua para que mujeres, personas mayores y otros colectivos puedan adaptarse a los cambios tecnológicos y las demandas del mercado laboral. También se propusieron medidas de flexibilización laboral, como horarios ajustables y teletrabajo, especialmente dirigidas a mujeres. Además, se enfatizó la necesidad de fomentar la inclusión y la diversidad mediante políticas que promuevan la contratación de personas con discapacidad y la adecuación de los espacios laborales para ellas. Para los jóvenes, se sugirió la creación de programas de mentoría que les permitan adquirir la experiencia necesaria y desarrollar habilidades blandas, fundamentales para su inserción laboral. Finalmente, se propuso implementar incentivos fiscales o subsidios para las empresas que contraten a personas de grupos subrepresentados, como mujeres, personas mayores y personas con discapacidad.
En conclusión, el encuentro “Red de Empresas por STGO 2024” subrayó la crucial necesidad de la innovación, la capacitación y la transformación cultural para superar las barreras de empleabilidad que enfrentan diversos grupos. Las discusiones y propuestas surgidas en las mesas de trabajo reafirmaron que es esencial trabajar de manera colaborativa, estableciendo alianzas entre el sector público y privado, para construir un entorno laboral más inclusivo y equitativo. Al abordar estos desafíos, se puede facilitar la integración de jóvenes y personas mayores en el mercado laboral, permitiéndoles contribuir de manera significativa a la economía del futuro. Este enfoque no solo beneficia a los individuos, sino que también promueve un desarrollo sostenible que fortalece a toda la sociedad.
